Sara Hurtado, campeona de España
de patinaje artístico en 2018
Sara Hurtado: “Al
deporte femenino se le está dando esa voz que antes no tenía”
El patinaje sobre hielo en España
tiene pocos rostros visibles. Sara Hurtado (Madrid, 1992) es una de las
pioneras de este, cada vez menos, desconocido deporte en España.
Con su primera pareja de patinaje,
Adriá Díaz, se convirtieron en 2014 en el primer equipo español que se
clasificaba para unos Juegos Olímpicos (Sochi, Ciudad en Rusia 2014) y en el primer dúo en representar a España en una competición de la
Unión Internacional de Patinaje Artístico.
Sara Hurtado: “Es triste que una mujer tenga que ganar primero una medalla para que se fijen en ella”
Poco tiempo después, Sara Hurtado se
trasladó a Rusia para entrenar junto al campeón del mundo junior, el patinador
ruso Kirill Khaliavin.
El año 2018 trajo para Sara Hurtado
y Kirill Khaliavin logros en distintas competiciones (un 12º puesto en los
Juegos Olímpicos de Pyeonchang, lograron una plata histórica en el Rostelecom
Cup de Moscú). La medalla más reciente ha sido la del Campeonato de España,
celebrado en diciembre de 2018 en Logroño, que supone el séptimo oro en la
carrera de Hurtado y el segundo desde que forma pareja con Khaliavin.
Deporte que exige gran
sacrificio, entrenamiento diario, trabajo duro, vivir lejos de casa y de la
familia, gastos económicos…
¡¡¡Te lo
juegas todo en cuatro minutos que dura la prueba!!!
En una de sus entrevistas, Sara destaca que se trata de un trabajo en
equipo, en el que hay que ser muy consistente y corregir errores juntos.
Su día a día en la capital de
Rusia, al igual que ella, son muy estrictos. La jornada junto a Kirill arranca
a las nueve y media de la mañana con clases de ballet o de elevaciones y a
continuación tienen dos sesiones de dos horas cada una. Tres días a la semana
realizan físico por la tarde o hay veces que refuerzan con bailes de salón, ya
que es una disciplina en la que necesitan saber bailar todo tipo de ritmos,
desde un tango hasta una rumba. Es una modalidad muy completa.
En Rusia el patinaje artístico es un deporte tremendamente popular y con
mucha tradición. El
patinaje está por encima del fútbol.
En España, gracias a Javier
Fernández, ha pegado un crecimiento muy fuerte porque la gente se interesa y
pregunta dónde lo van a echar, a qué hora, lo ven en directo…
Hay niños que están enamorados de
este deporte. Están las escuelas llenas, ya no solo la de Majadahonda, que es
la que conozco personalmente y en la que hay lista de espera. Están la de
Valdemoro, el Palacio de Hielo en Hortaleza, Granada, San Sebastián, Barcelona…
Y en todas está creciendo muchísimo. Este Campeonato de España ha sido el campeonato
con más participación y ha sido básicamente por los ‘peques’.
En
España cada vez se le está prestando más atención: «Es un espectáculo que
atrae mucho y a nosotros los españoles nos gusta mucho ver a alguien bailar.
Forma parte de nuestra cultura».
Dificultades:
Hay entidades que están haciendo muchísimo por el
deporte femenino, apoyándolo y promoviéndolo, ya que, “Hasta que no demuestras
que tienes el potencial no puedes tener ninguna subvención porque en realidad
no eres nadie”. “Se le está dando esa voz que antes no tenía por estar un poco
a la sombra de los otros deportes, porque los resultados siempre han estado
ahí”.
Riesgos del patinaje
artístico
Como en cualquier actividad deportiva, la práctica del patinaje conlleva
ciertos riesgos. Los patinadores no suelen usar cascos u otra
protección en las competiciones y por lo tanto hay un cierto riesgo de
golpearse la cabeza al caer, lo cual suele ser la causa de conmociones y lesiones graves;
en la categoría de parejas, las caídas durante las elevaciones pueden ocasionar
traumatismos con
consecuencias a largo plazo. Aunque con
menos frecuencia, este tipo de accidente puede ocurrir también en danza y
patinaje individual.
Los patinadores en pareja y danza pueden sufrir cortes con la cuchilla del
compañero o ser golpeados accidentalmente durante las piruetas o el descenso de
las elevaciones. Tanto los
patinadores en parejas como los individuales pueden chocar con otros
patinadores durante los entrenamientos.
Debido a la práctica continua del deporte durante todo el año, existe el
riesgo de desarrollar lesiones crónicas por sobreentrenamiento. También se
han dado casos de trastornos en la alimentación, como la anorexia o bulimia, o problemas
de estrés. Sin embargo, todo esto puede evitarse si se lleva un correcto
entrenamiento tanto físico como psicológico (sobre todo en etapa de
competición) así como una alimentación adecuada para cada individuo.